La administración responsable y eficiente de las finanzas públicas en estos dos años de Gobierno del Presidente Morales, se reflejó en el logro por segundo año consecutivo de un superávit fiscal, producto de la mayor eficiencia en la recaudación de impuestos y gravamen arancelario, la política de nacionalización de los hidrocarburos, la recuperación de la empresa fundidora Vinto y la mina Huanuni, pero también en la política de control del gasto corriente y en la priorización del gasto de capital que amplía la capacidad productiva de nuestra economía.
Por segundo año consecutivo el Ministerio de Hacienda conjuntamente con el Banco Central de Bolivia han firmado un programa financiero soberano, que preserva la estabilidad macroeconómica del país, con la fijación de metas para variables fiscales y monetarias y que en el 2007 registró una ejecución más que satisfactoria.
Los ingresos fiscales se incrementaron notablemente alcanzando un monto de Bs. 44.292,7 millones, un 25,3% más que el año 2006.
Por su parte, los ingresos corrientes (96,1% de los ingresos totales) muestran un incremento del 26,6%. Estos resultados se explican fundamentalmente por el aumento en las recaudaciones, del Servicio de Impuestos Nacionales y de la Aduana Nacional.
En el marco de la nueva política encaminada por el Gobierno Nacional contenida en el Plan Nacional de Desarrollo (PND), la inversión pública constituye uno de los instrumentos principales de política económica que concreta las acciones del PND. En ese sentido, el gasto de capital del SPNF en el 2007 representó el 30,2% del total de egresos fiscales y alcanzó el 12,7% del PIB con un incremento de 36,3% respecto a la pasada gestión, cifras históricas registradas en el país.
La política de endeudamiento público que el Gobierno Nacional aplicó en 2007 se basó en la reducción de los riesgos que el portafolio de la deuda pública a 2005 estaba expuesto, como ser plazos de vencimiento menores a un año, variaciones cambiarias, emisiones de la deuda en moneda extranjera, entre otros.
En el caso de la deuda interna se implementaron procesos que ampliaron los vencimientos de la cartera de obligaciones del Estado y redujeron las tasas de interés de mercado con el objeto de dar sostenibilidad y estabilidad al crecimiento de la deuda pública interna, y promover el uso de instrumentos de deuda en moneda nacional en sustitución al dólar americano y a la UFV. Gracias a esta nueva política de endeudamiento interno, la composición por monedas, tasas y vencimientos de la deuda interna del Sector Público No Financiero en Bolivia, experimentó cambios importantes que garantizan la sostenibilidad de la deuda interna.
En cuanto a la deuda externa el Gobierno llevó a cabo iniciativas para lograr el alivio del 100 por ciento de deuda del gobierno en el marco de la propuesta del G-8, tanto con el Fondo Monetario Internacional (FMI) como con el Banco Mundial (BM). Gracias a las negociaciones efectuadas el saldo de la deuda pública externa se vio reducido en 34% el 2006 y en 33% el 2007.
La focalización del gasto público hacia los sectores más vulnerables de la población permitió la generación de mejores ingresos para la población y mejores condiciones de vida sobre todo para los bolivianos de escasos recursos, el gasto público social por habitante pasó de Bs. 1.013 en 2005 a Bs. 1.128 en 2006 y a Bs. 1.141 en 2007.
La entrega del bono Juancito Pinto en 2007 favoreció a 1,3 millones de niños y niñas, ampliando el número de beneficiarios hasta el sexto de primaria, incluyendo a los alumnos adolescentes, jóvenes y adultos de Educación Especial y a las unidades de Educación Juvenil Alternativa (EJA).
A la vez, el aumento de salarios durante los dos últimos años permitió mejorar los ingresos de las familias bolivianas superando el estancamiento salarial que en el pasado evidenciaba los obstáculos de ascenso en el nivel de vida de la población. El Salario Mínimo Nacional, que durante los años 2003, 2004 y 2005 se mantuvo constante en Bs. 440 ascendió a Bs. 500 en 2006 y Bs. 525 en 2007. De igual manera, los salarios en salud y educación que durante los años 2003, 2004 y 2005 incorporaban incrementos de 4%, 3% y 4%, respectivamente, registraron incrementos salariales promedio, en ambos sectores, de 7% en 2006 y 6% en 2007.
Otra de las medidas adoptadas con el objeto de impulsar el dinamismo en el mercado laboral, fue la creación del Banco de Desarrollo Productivo, entidad financiera de segundo piso que promueve mecanismos de redistribución del ingreso nacional a través del financiamiento de desarrollo productivo urbano y rural, con el otorgamiento de créditos a micro y pequeñas unidades productivas, asociaciones productivas y otras formas legales compuestas principalmente por pequeños productores. El Banco de Desarrollo Productivo otorgó créditos en 2007 por un total de $us. 38,3 millones, 2.566 créditos individuales y 66 créditos asociativos, generando un total de 10.792 empleos desde sus inicios.
Dentro de las políticas antiinflacionarias desarrolladas por el Gobierno Nacional e impulsadas por el Ministerio de Hacienda junto a otras Carteras del Estado, se encuentra el apoyo a la producción de Maíz, Arroz, Trigo y Venta de Carne Vacuna en mercados populares (EMAPA), la coordinación entre el Viceministerio del Tesoro y Crédito Público y el Banco Central de Bolivia para la realización de operaciones de Mercado Abierto (OMA´s) más continuas y de mayor escala con el objeto de absorber el excedente de liquidez en el sistema financiero, la política de austeridad en el gasto fiscal, especialmente en el gasto corriente que en 2007 aumentó solamente en un 7,7%, el apoyo para la importación de alimentos e insumos alimenticios, la coordinación para el control en los mercados de la ciudad de La Paz contra la especulación de alimentos, origen de la inflación especulativa en el año 2007 y la prohibición de exportación de trigo, maíz y arroz.
Luis Alberto Arce Catacora.
MINISTRO DE HACIENDA